Tras dos días de CAOS, España cierra fronteras y regresan a más de 5 MIL migrantes

Luego de que desde inicios de esta semana miles de migrantes originarios de Marruecos se lanzaron al mar y nadaron hacia España, las autoridades de ambos países han tomado medidas para intentar frenar esta crisis humanitaria: el país ibérico ha devuelto a más de la mitad de las 8 mil personas que cruzaron a su territorio, mientras que Marruecos cerró su frontera con Ceuta.

El gobierno español señaló que ya han sido devueltos o han retornado voluntariamente 5 mil 600 migrantes, aunque se mantiene la preocupación acerca de los menores extranjeros que llegaron sin la tutela de ningún adulto.

Los migrantes nadaron cerca de los rompeolas rocosos del Mediterráneo, los cuales dividen la frontera entre ambos países.

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Por su parte, el presidente de España, Pedro Sánchez, viajó a la costa norte de Marruecos y prometió “restablecer el orden de inmediato” y devolver a quienes ingresaron ilegalmente.

¿Qué ocurre en Marruecos?

La situación de la población marroquí ha empeorado debido a la crisis del coronavirus, sobre todo la de aquellos que viven cerca de las ciudades españolas Ceuta y Melilla, pues el cierre de las fronteras ha generado un aumento de desempleo al desaparecer el comercio informal importante para las familias de la zona, según el medio RT.

Por ello, entre lunes y martes miles de migrantes, entre los que había familias completas, nadaron una distancia de unos 400 metros a Ceuta en búsqueda de una mejor vida, ante la falta de vigilancia del lado marroquí de la valla que separa los dos países.

El suceso que ya muchos consideran una crisis humanitaria ha dado pie a una multitud de rescates en el agua, sobre todo a niños pequeños que se habían separado de sus familias. Ahora buscan atender a esas personas a pesar de que las instalaciones en la pequeña ciudad española están desbordadas.

Ante el abrumador número de llegadas a territorio español, el gobierno de ese país ha decidido devolver de manera inmediata a la mayor cantidad de migrantes, sin embargo, esa práctica vulnera el derecho de no devolución de la Convención de Ginebra en 1951, que determina que un refugiado no puede ser regresado a un país donde teme ser perseguido.

A pesar de ello, es una práctica común en España desde hace décadas.

Aunque no solo fue este lunes sino durante los últimos meses cuando comenzó a aumentar la llegada de inmigrantes a las costas. Durante los meses de enero a abril se calcula que alrededor de 4 mil 500 migrantes fueron quienes llegaron a las islas Canarias.

CRS