Luz Elena González: la enfermedad de larvas que padeció y le hizo creer que tenía cáncer

Luz Elena González vivió momento de terror mientras se encontraba delicada de salud, pues durante 2021 tuvo que luchar contra las larvas que vivían en su cuerpo.

Así lo dio a conocer en marzo de ese año, cuando confesó que contrajo la enfermedad larva migrans cutánea debido a que comió pescado crudo.

Esto le provocó algunos síntomas como "hinchazón en la piel y dolor de cabeza", pues las larvas van recorriendo la piel.

“Desafortunadamente, la última vez que comí pescado crudo tuve larvas migrans, unos gusanitos que te van caminando por la piel, y pasó un buen tiempo antes de que los médicos lograran dar con lo que tenía”, dijo a TVNotas.

Asimismo, contó una de las aterradoras experiencias que tuvo, mientras estaba en los foros de grabación y terminó desmayada.

"Uno de los días de grabación, me encontraba en el parea de maquillaje cuando de repente vi mi mejilla con inflamación... de pronto, vi una larva caminando por el cachete y empecé a hiperventilar, me puse muy mal, fue una asquerosa impresión y me desmayé", indicó.

Además, mientras luchaba contra esto, pensó que tenía cáncer, debido a que varias cosas afectaron su estado de salud.

“La verdad es que sí, se me juntaron varias cosas, pues en marzo de 2021 me infesté de larvas por comer pescado crudo y se me calcificaron unos ganglios. Me espanté porque sentía bolitas en un seno y temí que fuera cáncer”, aseguró.

En cuanto sintió las bolitas, acudió al médico especializado, quien tras revisar y realizar los estudios pertinentes, concluyó que no se trataba de cáncer.

“Fue algo fuerte, estaba muy preocupada; gracias a Dios me hicieron una biopsia y no eran tumores”, pues el médico le explicó que las bolitas les salieron debido a que "eran calcificaciones que se generaron porque el cuerpo se defendía de los parásitos”.

¿Qué es la enfermedad larva migrans cutánea?

De acuerdo con los CDC, esta enfermedad se da debido a los anquilostomas que viven dentro de los cuerpos de animales como gatos y perros.

Esto se puede transmitir a través de las heces o lugares donde contaminan, por lo que las larvas pueden penetrar la piel si no hay protección como calzado o si caminan sobre tierra o arena.

La larva provoca enrojecimiento y picazón, así como huellas rojas y con volumen sobre la piel, las cuales pueden moverse y provocar dolor.

amv