Enrique Iglesias rechaza la millonaria herencia de su padre, Julio Iglesias; ¿por qué?

Consagrado como uno de los máximos exponentes del pop de habla hispana, Enrique Iglesias sorprende al rechazar la jugosa fortuna de su padre, Julio Iglesias, y estas son las razones.

Para nadie es un secreto que a sus 47 años de edad, el nacido en la capital española ha escalado su carrera más allá de lo que todos se imaginan, pues algunos hasta se han atrevido a asegurar que va mucho más allá de su padre.

Prueba de ello es la exitosa gira que vivió al lado de Ricky Martin y Sebastian Yatra hace unos meses, fechas que de inmediato abarrotaron cada una de sus localidades y corearon sus mejores éxitos.

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Lo que sí ha quedado muy claro es que el talento corre por las venas de los hombres Iglesias, y tanto musical como económicamente, la pareja de la extenista, Anna Kournikova, es acreedor a una gran herencia.

Del lado del talento, el cantante y ex futbolista de 79 años de edad ha heredado a su hijo un legado que ha mantenido en todo lo alto con su inigualable voz, por lo que ha pasado de generación en generación.

Mientras que en lo económico, ha amasado una millonaria fortuna que al parecer planeaba dejarle a sus nueve hijos, pues su fama de conquistador siempre lo persiguió a lo largo de más de 30 años de carrera.

¿A cuánto asciende la fortuna de Julio Iglesias?

De acuerdo con la revista Forbes, el cantante es considerado como uno de los 30 hombres más ricos de España, pues cuenta con una fortuna que podría estimarse en más de 800 millones de euros.

Cabe destacar que dentro de sus bienes destaca negocios inmobiliarios en Punta Cana, lujosas mansiones en Miami, y Marbella, así como una una isla entera en las Bahamas.

Todo esto sin mencionar una cadena de restaurantes, una marca de vodka, la línea de cosméticos Cover Girl, bodegas del vino espumoso denominado cava en los que invirtió 35 millones de dólares, y un avión privado que adquirió también por 35 millones de dólares.

Enrique Iglesias rechaza la herencia de su padre

Y es que para nadie es un secreto que la relación entre padre e hijo nunca ha sido del todo buena, ya que muchos aseguran que hay una competencia profesional que los ha alejado demasiado.

Es por eso que se dio a conocer que el intérprete de “El perdedor” decidió rechazar parte de la herencia que le corresponde como hijo de uno de los compositores más importantes a nivel mundial.

Todo se resume a una simple razón, el cantante no la necesita, pues asegura que ha forjado su carrera desde cero, por lo que decidió rechazarla rotundamente.

GBR.