MET Gala 2022: Kim Kardashian usó icónico vestido de Marilyn Monroe de casi 5 mdd; ¿cuál es su historia?

El evento más importante de la moda, la Met Gala 2022 se celebró este lunes en Nueva York donde las estrellas del momento se presentaron y deslumbraron con su mejor vestimenta.

En esta ocasión el tema para poder deslumbrar en la alfombra roja fue el "Gilged glamour", el cual está basado en la elegante vestimenta de entre 1870 y 1890 en EE.UU.

Grandes celebridades desfilaron y mostraron sus mejores looks como Blake Lively, Cardi B, Eiza González, Anitta, Rosalía, Normani, Jared Leto, Camila Cabello, entre otros.

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Quien dio una de las grandes sorpresas fue sin duda Kim Kardashian, quien lució un vestido histórico de la historia del país y tuvo que hacer una gran transformación junto a Pete Davidson.

La socialité usó el icónico vestido brillante que fue propiedad de Marilyn Monroe y que lució junto a John F. Kennedy en su cumpleaños 45 mientras le cantaba "Happy Birthday Mr. President".

"La idea se me ocurrió después de la gala de septiembre del año pasado. Pensé: ¿qué habría hecho para el tema estadounidense si no hubiera ido de Balenciaga? ¿Qué es lo más estadounidense que se me ocurre? Pues Marilyn Monroe", indicó Kim.

Para ponerse en la piel de la actriz, Kim tuvo que hacer cambios radicales en ella, como teñirse el pelo de rubio, lo cual, la llevó a hacerlo por más de 14 horas para lograr el tono perfecto.

El vestido está basado en el boceto hecho por Bob Mackie y fue diseñado por Jean-Louis y estaba compuesto de seis mil cristales y causó todo un revuelo en 1962.

"Hoy en día todo el mundo lleva vestidos transparentes, pero en aquella época no era así. En cierto sentido, es el naked dress original. Por eso fue tan impactante", dijo la socialité.

Se trata del vestido más caro vendido en una subasta y tuvo un costó de 4.8 millones de dólares en 2016 y fue adquirido por el museo Ripley's Believe It Or Not.

Asimismo, esta es la primera vez que alguien lo usa desde que Marilyn lo hizo. Se mantiene en condiciones especiales como ser guardado en una cámara oscura, con una temperatura de 20 grados y un 40-50% de humedad.

Aunque la réplica le quedó exacta a la empresaria, cuando se tuvo que probar el original no fue así, por lo que tuvo que recurrir a transformar su cuerpo, ya que el vestido no se puede modificar.

"Así que cuando vi que no me quedaba bien quise ponerme a llorar porque no se puede modificar en absoluto", agregó.

La estrella del reality show tuvo que bajar siete kilos en solo tres semanas para poder pasar la prueba final del museo, lo cual consistió en someterse a una dieta drástica, donde se deshizo de los azúcares y carbohidratos y comió proteínas sanas y verduras únicamente.

Además, el vestido solo fue usado por unos minutos y tuvo que ponérselo en pleno evento con la ayuda de un conservador de Ripley's que usó guantes especiales para ello.

"Soy muy respetuosa con el vestido y con lo que significa para la historia de Estados Unidos. Nunca querría sentarme con él, ni comer en él, ni correr el riesgo de que se dañe, y no llevaré el tipo de maquillaje corporal que suelo llevar"

Con información de Vogue

amv