Muere Polo Polo: ¿Qué es la demencia vascular, la enfermedad que padecía el comediante?

El mundo del espectáculo está de luto luego de que este lunes se confirmará el fallecimiento del comediante mexicano Leopoldo Roberto García Peláez Benítez, mejor conocido como Polo Polo, a la edad de 78 años. Su familia confirmó en un comunicado que el famoso murió en su casa, de causas naturales; sin embargo, se ha dado a conocer que durante años padeció de una enfermedad llamada demencia vascular. ¿Qué es esta afección y cómo se diagnostica?

¿Qué es la demencia vascular?

La demencia vascular es una pérdida permanente del funcionamiento cerebral que afecta la memoria, el pensamiento, el lenguaje, el juicio y el comportamiento. Este padecimiento es causado por una serie de accidentes cerebrovasculares que interrumpen el flujo sanguíneo al cerebro. Se trata del segundo diagnóstico de demencia más frecuente después del Alzheimer, según indica el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos (HHS).

¿Qué causa la demencia vascular?

La demencia vascular o trastorno neurocognitivo mayor ocurre como resultado de diversas afecciones que dañan los vasos sanguíneos del cerebro e interrumpen el flujo de sangre y oxígeno hacia este importante órgano humano. En caso de que el flujo de sangre se detenga por más de unos pocos segundos, el cerebro no puede obtener oxígeno, lo que ocasiona que las células cerebrales mueran, causando un daño permanente.

Los factores de riesgo para la demencia vascular incluyen:

• Diabetes
• Endurecimiento de las arterias (ateroesclerosis), enfermedad cardíaca
• Presión arterial alta (hipertensión)
• Tabaquismo
• Accidente cerebrovascular u otra enfermedad vascular

Síntomas y señales de alarma

Algunos de estos accidentes cerebrovasculares son "silenciosos", denominados así porque en ocasiones solo afectan una parte pequeña del cebero y no hay ningún síntoma. Sin embargo, con el tiempo, a medida que más zonas del cerebro resultan dañadas, empiezan a aparecer más signos de alarma.

Aún así, no todos los accidentes cerebrovasculares son silenciosos. Algunos más grandes llegan a afectar la fuerza, la sensibilidad u otra función del cerebro y el sistema nervioso, ocasionando:

• Desorientación
• Dificultad para prestar atención y concentrarse
• Incapacidad para organizar pensamientos o acciones
• Dificultad para analizar una situación y desarrollar planes
• Lentitud al razonar
• Problemas de memoria
• Nerviosismo y agitación

Cabe mencionar que no todas las personas que han sufrido un accidente cerebrovascular desarrollan demencia vascular. El riesgo de sufrir alguno depende del tamaño y la cantidad y de las regiones del cerebro afectadas.

La demencia vascular también puede ser el resultado de otras afecciones que impiden el flujo sanguíneo y el suministro de oxígeno al cerebro, como el estrechamiento de las arterias.

¿Hay tratamiento para la demencia vascular?

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), actualmente no hay ningún tratamiento que pueda curar la demencia o revertir su progreso. No obstante, existen varias intervenciones que ayudan a mejorar la calidad de vida de quienes padecen esta enfermedad.

Principalmente, los médicos sugieren atender las siguientes recomendaciones si es paciente o familiar de alguien con este tipo de demencia:

• Primero, diagnosticarla oportunamente para que el tratamiento sea más efectivo.
• Priorizar la salud física y la cognición
• Detectar y tratar síntomas relacionados con la conducta y rasgos psicológicos.

bnaj