¿Cómo murió el fisicoculturista Justyn Vicky durante su rutina de ejercicio?

El mundo del fisicoculturismo una vez más está del luto, después de que a principios de este mes se desvelará la causa de muerte del influencer fitness Jo Linder, este fin de semana se informó el fallecimiento de un joven de 33 años en un gimnasio.

Se trata del fisicoculturista Justyn Vicky, quien murió el pasado sábado 15 de julio mientras realizaba su rutina de ejercicio en un gimnasio en Bali, Indonesia. De acuerdo, con información The Sun, el joven cargaba una barra con un peso de 210 kilos cuando cayó bocabajo y esta le aplastó el cuello por detrás.

En el lugar se encontraban más asistentes del gimnasio The Paradise Bali, quienes horrorizados por el terrible suceso llamaron al cuerpo médico, quienes lo trasladaron al área de urgencias de un hospital local.

Se reportó su fallecimiento después de que fuera sometido a una operación debido a que el cuello se le rompió al instante y la barra comprimiera nervios vitales conectados al corazón y pulmones.

Así será recordado Justyn Vicky

Justyn Vicky era un aficionado del culturismo y además muy reconocido en The Paradise Bali, el cual frecuentaba con regularidad. El gimnasio compartió sus últimas palabras hacía el influencer, donde lo recordaron como alguien inspirador y motivador.

“Su energía contagiosa y su genuina pasión por ayudar a otros a transformar sus vidas nos conmovieron profundamente. A través de innumerables entrenamientos, palabras de aliento y orientación compasiva, se convirtió en una parte irremplazable de nuestros viajes de acondicionamiento físico y nuestra familia de gimnasio”, escribió el gym.

El lugar de entrenamiento pidió honrar su memoria y seguir sus enseñanzas y que compartía. “Honremos su memoria al continuar abrazando los valores y las lecciones que nos impartió: luchar por nuestras metas, animarnos unos a otros y apreciar el regalo de la salud”.

El entrenador personal de 33 años era aficionado de las redes sociales donde día a día compartía las pesadas rutinas a las que se sometía y con ello “motivar” a las poco más de 33 mil personas, quienes seguían sus pasos en Instagram.