¿Afecta a la salud mental lo que sufren las mujeres al migrar?

Las mujeres representan una proporción significativa de las personas migrantes y enfrentan riesgos específicos asociados tanto a su género como a su situación migratoria.

La  violencia es una constante, desde el abuso sexual, la explotación laboral y la discriminación hasta la violencia estructural son situaciones deshumanizantes, vivencias que afectan su salud mental y dejan cicatrices, advirtió la Directora de Género e Inclusión del Instituto de las Mexicanas y los Mexicanos en el Exterior (IME) de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) del Gobierno de México, Lourdes Lezama.

La violencia hacia las mujeres en condiciones de movilidad es una crisis humanitaria en la que la salud física y mental se ve profundamente afectada por la violencia sufrida en el origen, lo que las obliga a migrar, pero sobre todo en el tránsito, donde son víctimas de todo tipo de abusos e incluso en los lugares de destino, donde la discriminación, la xenofobia y las barreras linguísticas y culturales les impide adaptarse y perpetúa las agresiones hacia ellas.

En el marco de los 16 días de activismo contra la violencia de género, Lezama resaltó que 48% de las personas migrantes son mujeres quienes enfrentan desafíos extremos en el camino. De acuerdo con datos de Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), 72% de las mujeres refugiadas en tránsito por América Latina reportan haber sufrido violencia; según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), una de cada tres migrantes experimenta algún tipo de violencia sexual durante su tránsito y la UNICEF reporta que las niñas y mujeres jóvenes representan el 49% de las víctimas de trata identificadas en contextos migratorios.

Esta marcada vulnerabilidad por su género se ve agravada ya que las rutas migratorias y los entornos de destino suelen carecer de estructuras de apoyo incrementando su riesgo, advirtió.

Durante el conversatorio “El impacto de la violencia en la salud mensual de las mujeres en condiciones de movilidad”, la funcionaria indicó que entre los mayores riesgos está el de la violencia sexual ya que durante el tránsito, particularmente en rutas controlados por traficantes o grupos armados hasta un 60% de las migrantes han sido víctimas de este tipo de violencia.

El tránsito es la fase de migración más peligrosa, durante ésta suelen ser víctimas de otras violencias como la trata con fines laborales, también suelen sufrir violencia física, pueden ser golpeadas, torturadas, atacadas por traficantes, otros migrantes o incluso por autoridades corruptas; violencia psicológica como las amenazas, humillaciones, cohesión emocional y son constantes que impactan gravemente su autoestima y bienestar emocional.

Además, señala Lezama, existe violencia estructural reflejada en falta de acceso a servicios básicos  como la salud, refugios seguros, apoyo legal y las políticas anti migratorias y de separación familiar.

Estrés postraumático, flashbacks, pesadillas y una constante sensación de peligro, marcas de un proceso migratorio violento

La violencia y el trauma vivido tienen efectos devastadores en la salud mental de las mujeres en movilidad. Con gran frecuencia, explicó la experta, las mujeres que migran y sufren violencia sufren un estrés crónico puede impedirles llevar una vida normal  incluso llegando a un entorno seguro;  la ansiedad y la depresión, la  incertidumbre, el aislamiento social y el temor a la deportación, generan altos niveles de ansiedad y desesperanza además de estrés postraumático, flashbacks, pesadillas y una constante sensación de peligro.

Lamentablemente, por estigmas, muchas mujeres no buscan ayuda psicológica lo que perpetúa el impacto del trauma llevándolo incluso a un plano transgeneracional.

¿Cómo combatir la violencia hacia las mujeres migrantes?

La Directora de Género e Inclusión del Instituto de las Mexicanas y los Mexicanos en el Exterior asegura que un paso fundamental es informar a las mujeres sobre los riesgos de la migración y sus derechos.

Las mujeres migran por múltiples causas como la violencia doméstica, la pobreza extrema, desplazamientos forzosos, pero la falta de información y preparación en el origen aumenta los peligros en el tránsito, apunta Lezama.

En ese sentido, buscar rutas seguras, informarse sobre refugios, organizaciones que brinden apoyo en rutas migratorias claves puede disminuir los riesgos en el tránsito.

En los destinos, es fundamental contar con políticas inclusivas, facilitar el acceso a servicios básicos, diseñar politicas que favorezcan la integración, reduzcan la discriminación y los factores agravantes como son las políticas migratorias restrictivas, las detenciones prologadas, la separación de familias, las restricciones de asilo y las políticas de devolución inmediata.

Red consular ofrece apoyo psicológico gratuito y confidencial para las víctimas

Atender la salud mental de las mujeres migrantes víctimas de violencia a través de una atención psicológica integral y brindar apoyo para la contención emocional es fundamental. En ese sentido las representaciones consulares y diplomáticas son un espacio donde se busca dar acceso a esta atención sin importar la condición legal o el estatus migratorio de las víctimas.

Elizabeth Jimenez Rivera, Directora de Salud y deporte del IME explica que en los  consulados de Estados Unidos, las ventanillas de salud junto con otras instituciones académicas ofrecen un programa de atención en salud mental.

“Tenemos recursos a través de la Comisión de Salud Fronteriza, con la UNAM y la Ibero”. Explicó que en las ventanillas de salud el personal está capacitado para ayudar inicialmente y derivar a las víctimas con aliados locales o con las instituciones para recibir la ayuda de forma virtual.

El correo electrónico ime.salud@sre.gob.mx, precisó Jimenez Rivera, es una herramienta confidencial y segura para todos los mexicanos y mexicanas en el exterior en donde se puede facilitar el enlace con profesionales de la salud mental.