Trump firma decreto para establecer el inglés como idioma oficial: ¿Qué cambiará?

El presidente Donald Trump firmó este sábado una orden ejecutiva que designa al inglés como el idioma oficial de Estados Unidos, eliminando un mandato del expresidente Bill Clinton que obligaba al gobierno y a organizaciones con fondos federales a brindar asistencia lingüística a personas que no hablan inglés.

Según una hoja informativa de la Casa Blanca, la designación del inglés como idioma nacional por primera vez en la historia del país busca “promover la unidad, establecer eficiencia en las operaciones gubernamentales y crear un camino para la participación cívica”. Sin embargo, este decreto podría tener un impacto significativo en millones de personas que viven en Estados Unidos y que hablan otros idiomas en sus hogares e instituciones.

Impacto en la comunicación federal

Con esta medida, la provisión de documentos y servicios en idiomas distintos al inglés por parte de agencias gubernamentales pasa a ser opcional. Esto podría dificultar el acceso de las minorías no angloparlantes a información esencial y servicios públicos.

En casos de emergencias, la falta de información en otros idiomas podría dejar a cientos de miles de personas sin acceso a refugios o asistencia humanitaria. Además, podría afectar derechos fundamentales, como la participación electoral, si la información en las boletas electorales no es traducida.

Uno de los primeros pasos del gobierno de Donald Trump en este sentido fue eliminar la versión en español del sitio web oficial de la Casa Blanca. Durante la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) en 2024, Trump expresó su oposición a una sociedad multilingüe:

Consecuencias sociales y psicológicas

Un estudio de la Asociación Estadounidense de Psicología (APA) titulado “El Movimiento Solo-Inglés” advierte sobre los efectos negativos de esta política en la sociedad. Según la APA, la imposición del inglés como único idioma oficial podría afectar el desarrollo psicosocial de los inmigrantes, deteriorar las relaciones intergrupales y reducir el acceso a servicios de salud y educación.

En el ámbito educativo, la APA indica que la política podría afectar la identidad social de los estudiantes de origen inmigrante, quienes ven su lengua materna como un elemento clave de su identidad cultural. Investigaciones académicas han demostrado que forzar a los niños a abandonar su lengua materna en el sistema educativo puede generar efectos psicológicos adversos y afectar su rendimiento académico.

Impacto en el mercado laboral

El Departamento de Trabajo de Estados Unidos (DOL) reconoce actualmente el valor de contar con empleados bilingües, indicando que “el personal multilingüe garantiza que los programas y servicios se comuniquen de manera eficaz a todos los trabajadores y empleadores”. Sin embargo, con la nueva orden ejecutiva, los departamentos gubernamentales y organizaciones con financiamiento federal podrían optar por eliminar servicios en otros idiomas.

Además, las normas actuales del DOL establecen que una política laboral que exija exclusivamente el inglés sería ilegal si discrimina por origen nacional. Sin embargo, la orden ejecutiva podría cambiar este criterio, afectando la equidad en el lugar de trabajo.

Reacciones y posibles consecuencias

Diferentes sectores han expresado preocupación por la decisión del gobierno de Donald Trump. Organizaciones de derechos civiles han advertido que la medida podría aumentar la discriminación contra comunidades no angloparlantes y debilitar la inclusión social en el país.

Por otro lado, algunos partidarios de la medida consideran que establecer el inglés como idioma oficial fortalecerá la cohesión nacional y facilitará la integración de los inmigrantes en la sociedad estadounidense. No obstante, los expertos advierten que la exclusión lingüística podría provocar efectos contraproducentes, afectando negativamente la economía, la educación y la participación cívica de las minorías en Estados Unidos.

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