Trump impone aranceles del 25% a países que compren petróleo de Venezuela

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este lunes la imposición de un arancel del 25% a cualquier nación que adquiera petróleo o gas de Venezuela. La medida, que entrará en vigor el 2 de abril, busca presionar al gobierno de Nicolás Maduro y limitar los ingresos de la nación sudamericana provenientes de su principal producto de exportación.

Trump justificó la medida en una publicación en Truth Social, donde afirmó que:

Además, el mandatario aseguró, sin presentar pruebas, que el gobierno venezolano ha enviado “intencionadamente y engañosamente” criminales a Estados Unidos, incluidos individuos violentos y miembros de bandas como el Tren de Aragua.

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Esta acción se produce en un contexto en el que Trump ha endurecido su postura contra Venezuela, revirtiendo algunas flexibilizaciones implementadas durante la administración de Joe Biden. A principios de marzo, el presidente estadounidense ya había emitido un plazo de 30 días para la liquidación de una licencia otorgada a Chevron en 2022, permitiéndole operar en el país sancionado y exportar su petróleo.

Impacto en el comercio mundial de petróleo

Venezuela es un actor importante en el mercado energético, aunque su participación ha disminuido en las últimas décadas. Según datos del Departamento de Comercio de Estados Unidos, el país sudamericano exportó petróleo y gas a Estados Unidos por un valor de 5.600 millones de dólares en 2024. Sin embargo, esto representa solo el 3% del total de importaciones energéticas estadounidenses, muy por detrás de Canadá, que aportó el 60% del crudo adquirido por Estados Unidos.

China, el mayor comprador de petróleo venezolano, es uno de los países que podría verse más afectado por los nuevos aranceles, ya que en febrero recibió unos 503.000 barriles diarios (bpd) de crudo y combustible venezolano, lo que representó el 55% de las exportaciones totales de Venezuela. España, Italia, Cuba e India también se encuentran entre los principales compradores del petróleo venezolano y podrían enfrentar repercusiones económicas debido a la nueva política de Washington.

Hasta el momento, el gobierno de Nicolás Maduro no ha emitido una respuesta oficial a la medida anunciada por Trump. Sin embargo, se espera que esta decisión genere tensiones adicionales en la ya compleja relación entre ambos países. Venezuela ha buscado diversificar sus socios comerciales en los últimos años, reforzando su cooperación con China, Rusia e Irán para sortear las sanciones impuestas por Estados Unidos.

En el ámbito interno estadounidense, la decisión de Trump se produce en medio de un clima de incertidumbre económica, ya que el presidente había insinuado la posibilidad de retrasar otros aranceles previamente anunciados sobre productos farmacéuticos, automóviles y madera. A pesar del anuncio de las nuevas tarifas sobre el comercio con Venezuela, los mercados financieros en Estados Unidos reaccionaron con optimismo y abrieron al alza el lunes.

La nueva política arancelaria de Trump también se vincula con su postura sobre la inmigración venezolana. A principios de marzo, el mandatario invocó la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para justificar la deportación de presuntos miembros del Tren de Aragua sin necesidad de órdenes finales de expulsión emitidas por jueces de inmigración. La medida forma parte de una estrategia más amplia de endurecimiento de la política migratoria de su administración.

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