Reportera del NYT en México señala que la producción de fentanilo en Sinaloa está en pausa

“Lo que hemos visto es que al menos en este contexto, en este mes y en este lugar, los aranceles han funcionado. Por ahora, al menos”: Natalie Kitroeff

Reportera del NYT en México señala que la producción de fentanilo en Sinaloa está en pausa
Los gobiernos de México y Estados Unidos se encuentran en constantes conversaciones de seguridad, comerciales y políticas actualmente. Foto: Freepik / Ilustrtiva.

En enero de 2025, el New York Times publicó un reportaje sobre la existencia de laboratorios de fentanilo en Culiacán, Sinaloa. La pieza informativa estuvo a cargo de la corresponsal en jefe en Ciudad de México, Natalie Kitroeff quien logró adentrarse en el mundo de la producción de esta droga que mata todos los días a cientos de personas en los Estados Unidos.

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En su momento el reportaje fue cuestionado por parte de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo quien aseguró que el proceso mostrado de la elaboración del fentanilo no correspondía.

En el episodio más reciente del podcast “The Daily” del New York Times, titulado “Cómo los aranceles están sacudiendo la guerra contra el fentanilo” (How Tariffs Are Shaking Up the War on Fentanyl, en su título original en inglés), Natalie Kitroeff asegura que al parecer, a medida que el presidente estadounidense Donald Trump se vuelve más y más punitivo, puede obtener resultados en la batalla contra esta droga.

“Lo que hemos visto es que al menos en este contexto, en este mes y en este lugar, los aranceles han funcionado. Por ahora, al menos”, asegura tras relatar que volvió a Sinaloa, al mismo estado en el que realizó su reportaje inicial sobre los laboratorios y lo que encontró es que por ahora, no están operando.

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Desde su campaña y luego su confirmación como presidente, Donald Trump amenazó con la imposición de aranceles a México.

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Esta posición ha venido cambiando, ha sido pausada, una y otra ocasión, la más reciente tras la llamada de este 06 de marzo con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, a quien Trump reconoció cooperación y un arduo trabajo para detener el flujo migratorio hacia su país y la entrada de fentanilo.

En diciembre de 2024 Kitroeff y su colega Paulina Villegas comenzaron a hacer recorridos a Sinaloa, para adentrarse en el mundo de la elaboración del fentanilo, hicieron contactos, hablaron con gente, desde cocineros hasta clientes, según relató en el podcast.

Pero aunque afirma, estaba muy escéptica de qué tanto las acciones de Trump tendrían una gran posibilidad de cambiar las realidades de fentanilo en México “quería volver a un laboratorio para ver si todas estas amenazas, si toda la presión que Trump había puesto en México había llevado a cambios reales, si algo de esto realmente había hecho una diferencia”.

Y aseguró que las dinámicas parecían haber cambiado completamente desde la última vez que estuvieron allí.

“Cuando empezamos a hablar con nuestros contactos del cartel, nos dijeron que básicamente no había producción de fentanilo sucediendo en la ciudad… que la producción estaba sucediendo en otros lugares del país. No es como si el fentanilo no estuviera siendo producido en México en gran medida pero, al menos ahí, las cosas se habían detenido”.

En la charla del podcast “Cómo los aranceles están sacudiendo la guerra contra el fentanilo”, Natalie Kitroeff asegura que sus contactos se sienten bajo tanto escrutinio y presión que no están “cocinando” nada.

“Estamos tratando de vender nuestros coches y otras propiedades para tratar de recuperar el ingreso perdido porque nada está pasando aquí. No hay laboratorio para visitar este momento”, le contaron.

“Y vimos por primera vez que tenían miedo… Es muy claro que algo está cayendo”, aseguró.

La periodista incluso aseguró que un miembro de un cartel de nivel más alto con quien se reunió dijo que la única opción para él ahora era sobrevivir. “No, no estamos cocinando. No, no estamos haciendo fentanilo. Eso está cerrado ahora mismo. Puede que sea temporal. Estamos moviendo los laboratorios”, le dijeron.

La estrategia de Trump, señala, muestra el daño que los Estados Unidos está dispuesto a hacer a la economía de México en busca de descubrir cuánto puede hacer contra esta droga.

Obviamente, las autoridades mexicanas estaban en las calles antes de esto, pero los miembros del cartel dicen que están sintiendo el calor a un nivel mucho más alto.

Trump parece exponer que el gobierno mexicano es capaz de hacer mucho más.

Claudia Sheinbaum, refiere, llegó a la oficina alrededor de un mes antes de que Trump fuera elegido y luego empezó a hacer estas amenazas. Ella había señalado antes de eso que estaba dispuesta a enfrentar a los carteles. “Así que no sabemos cuánto de esto podría haber pasado sin Trump porque estaba dispuesta a cambiar la aproximación. Pero creo que es bastante claro que la cantidad de progreso, los arrestos, el ritmo de estas acciones es algo que no habíamos visto en la historia reciente en México.

Las amenazas de la intervención militar en cualquier modo, puede ser un factor, pero la amenaza de las tarifas ha parecido mucho más creíble y la que al parecer realmente provoca la acción porque hay una fecha.

“Cuando hay una fecha, la gente lucha para alcanzar esa fecha, especialmente si al otro lado de eso hay una potencial destrucción económica. Así que creo que eso es lo que realmente motiva aquí”.

Hace días, el gobierno mexicano entregó al gobierno estadounidense a 29 líderes de drogas. Nadie sabe exactamente qué es lo que Trump quiere. Y es un misterio si hay actualmente marcadores aquí o no, o si las tarifas van a seguir.

La realidad, concluye, es que esta presión es horrible para México. Claudia Sheinbaum y su gobierno van a hacer absolutamente todo lo que puedan para salir de esto.

Entre las preguntas pendientes están si Trump decidirá abordar el tema de la demanda de la droga en los Estados Unidos, la adicción que ha llevado a tantas personas a esta sustancia letal, ¿Seguirá con la presión ¿Y por cuánto tiempo puede Trump realmente mantener a México en esta posición de intentar satisfacer sus exigencias? Porque si alcanzan un acuerdo en tarifas, entonces, ¿qué?

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Angélica Simón Ugalde

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