La razón por la que “la promesa migratoria” ha dado dolores de cabeza al gobierno de Joe Biden

Han pasado nueve meses desde que Joe Biden se convirtió en el dueño de la Casa Blanca, y desde entonces, las cosas no han sido nada fáciles, pues su antecesor triplicó el número de inmigrantes que pretendían pasar a su país.

El presidente de EE.UU. pronosticaba que para estas fechas haber dado un gran avance contra las políticas que ya había establecido Donald Trump, pero solo ha conseguido que la Cámara de Representantes apruebe dos iniciativas de ley para unos cuatro millones de indocumentados.

Cabe mencionar que tan sólo unos días después de que iniciara su gestión como máxima autoridad de la población estadounidense, revocó la política conocida como "tolerancia cero" de enjuiciar a los inmigrantes que cruzaron ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México.

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Esta ley no sólo detenía e enjuiciaba a miles de migrantes, sino también separaba a miles de niños de sus familias, y lo tenían en condiciones poco humanas.

Cabe mencionar que la promesa migratoria que hizo Biden consistía en no separar familias, y acelerar los procesos de legalización de los titulares del Estatus de Protección Temporal -TPS- y trabajadores agrícolas.

Los procesos consistían en ofrecer residencia provisional por 10 años, y cuando estos concluyeran, calificarían para recibir la residencia permanente (Green Card), y otros cinco años más tarde serán elegibles para pedir la ciudadanía por naturalización.

Sin embargo, la respuesta del senado no era la esperada, pues ambos partidos demócratas y republicanos, tienen 50 votos cada uno y el empate lo rompe la vicepresidenta Kamala Harris, pero la oposición dijo que no daba un sólo voto hasta que fuera resuelta la crisis en la frontera.

Crisi fronteriza entre México y Estados Unidos

Para nadie es un secreto que las cosas son bastante difíciles para el gobierno de Joe Biden, pues las grandes caravanas de migrantes han superado los número que manejó en 2019 Donald Trump.

Para febrero de este año, fueron devueltos un total de 70 mil 100 inmigrantes, los cuales fueron rechazados, según datos ofrecidos por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. (CBP, por sus siglas en inglés).

Por otro lado, se ha dado a conocer que el actual presidente de Estados Unidos, ha tratado de ir manejando las cosas que dejó su antecesor, pues a lo largo de cuatro años de mandato:

• Emitió más de 400 órdenes ejecutivas y memorandos que cambiaron reglamentos de programas y políticas migratorias sin la aprobación del Congreso.

Nuevo plan de Joe Biden

Aunque muchos han visto que de trata de una promesa imposible de cumplir, Biden tiene cubierto otro flanco, pues asegura que la iniciativa nbi está del todo perdida, pues aseguró que la reforma seguirá siendo muy difícil de pasar porque casi no hay nada de apoyo por parte de los republicanos.

Cabe señalar que el gobierno actual cuenta con una carta bajo la manga, y está a punto de usarla, pero si han mencionado que no es tan generosa la propuesta como las anteriores.

Se trata de proteger a ocho millones de indocumentados de la deportación, esto con una acción diferida de deportación similar a DACA, por lo que se les concedería un permiso de trabajo renovable.

Pero, para que está iniciativa de los demócratas pueda ser considerada y ejecutada, es importante actuar en bloque.

Es decir: necesitarán el apoyo de la totalidad de la bancada más el voto de la vicepresidenta Harris para aprobar el paquete de reconciliación.

En un dado caso que así llegara a ser, podrán aprobar el presupuesto de gastos del próximo año 2022, y Biden deberá seguir utilizando su poder ejecutivo para proteger a los 11 millones de indocumentados que están en el país.

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