Administración de Trump confirma que está arrestando a familias con niños para frenar inmigración ilegal

Durante el primer mandato del presidente Donald Trump, una de sus controversias más fuertes estuvo relacionada a la detención de familias completas de indocumentados, acciones que incluían la reclusión temporal de menores de edad en celdas similares a “jaulas.” Y pese a la desaprobación que esto conllevó de parte de instancias especializadas en derechos humanos, todo indica que dichas prácticas se retomaron ante la promesa de realizar “la deportación más grande de la historia.”

Gobierno de Trump está arrestando a familias de migrantes indocumentados con niños

En días recientes, el Gobierno de Donald Trump reconoció ante diversos medios de comunicación que está deteniendo a familias de migrantes con niños, lo cual, forma parte de una campaña más amplia para frenar la llegada y la permanencia de indocumentados en Estados Unidos. Según dijo Tricia McLaughlin, secretaria adjunta del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés,) los arrestos se realizan respetando el Estado de derecho:

“(Por lo general) las personas detenidas tienen órdenes finales de deportación por parte de jueces federales, pero esta administración no va a ignorar el Estado de derecho (...) Los centros de detención de Karnes y Dilley serán reabiertos y “readaptados para las familias (...) La mejor opción para los extranjeros ilegales es autodeportarse. Si se van ahora, todavía pueden tener la oportunidad de regresar y vivir el Sueño Americano.”

Tal y como explicó McLaughlin en un comunicado, los centros de detención de Karnes y Dilley, en Texas, serán los primeros en “remodelarse” para recibir a familias de migrantes ilegales con niños, pero no serán los únicos. Se sabe además que CoreCivic, una agencia operativa de prisiones privadas, acordó con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE,por sus siglas en inglés) reanudar las operaciones de un centro de detención con capacidad para 2,400 personas en Dilley. Éste, serviría como un recinto renovado de detención de indocumentados independientemente de su edad.

Ahora bien, aunque Tom Homan (el “zar de la frontera”,) y Kristi Noem (secretaria del DHS,) aseguraron que los esfuerzos de deportación se centrarían en arrestar a migrantes indocumentados con antecedentes penales, también advirtieron que ninguna persona sin papeles puede considerarse excenta de ser puesta bajo custodia. Y pese a la controversia que recluir menores de edad pueda desatar en el futuro, Homan declaró a Fox News que “por muy triste que sea la aplicación de las leyes de migración, es algo que se debe acatar para asegurar la frontera y salvar vidas.”

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