Mujer compra busto romano por 35 dólares; resultó ser un tesoro histórico de casi 2 mil AÑOS

Con el paso del tiempo, se han perdido objetos alrededor del mundo que cuentan con un valor inigualable y del cual no se sabe, como el busto romano que una mujer compró en una tienda de Texas por un costo de 35 dólares sin saber que se trataba de un tesoro histórico qué había desaparecido hace años.

Esta es la historia de Laura Young, quien acudió a una sucursal de Goodwill en la localidad de Austin, Texas y se encontró con el busto romano. Al verlo, le llamó la atención y el precio, pues se ofertaba a un precio de 35 dólares.

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La compra ocurrió en agosto del 2018 y en cuanto llegó a su casa comenzó a realizar una investigación para ver si su escultura tenía una historia interesante o detrás o sólo se trataba de un simple artefacto de colección.

Tras navegar por la web y acudir a casas de subastas y con expertos, la mujer se percató que el busto romano de mármol tenía un cercano vínculo con figuras importantes de la Antigua Roma y que, por lo mismo, era un tesoro histórico que había estado perdido por muchos años.

Mujer compra busto romano sin saber que era valiosa reliquia

Con el paso del tiempo, la casa de subastas Sotheby’s confirmó que la pieza había sido elaborada en la época de los antiguos romanos, dado que estimaron una edad de 2000 años. Con un exhaustivo rastreo de datos digitales, se encontraron fotos del busto romano en Aschaffenburg, Baviera, Alemania en el año de 1930.

Es así que se han preguntado quién es el personaje esculpido en el busto romano, por lo que la becaria curatorial postdoctoral en SAMA, Lynley McAlpine dijo que se trata de Sextus Pompey, un líder militar romano e hijo de Pompeyo el Grande, aliado de Julio César.

¿Cuál es la historia del busto romano comprado en una ganga?

Luego de exhaustivas investigaciones, se dio a conocer que el busto romano que compró la mujer se encontraba en una réplica de una casa de Pompeya que era conocida como Pompejanum, donde fue encargada por el rey Luis I de Baviera.

Sin embargo, se le vio por última vez en ese lugar cuando sucedió la Segunda Guerra Mundial y después de ello no se le volvió a ver hasta que la mujer lo encontró en la ya mencionada tienda. Debido a esto, se piensa que alguien lo robó de donde estaba y fue como llegó a Estados Unidos.

Tras la odisea del busto romano, se llegó al acuerdo de que se expondrá por un año en el Museo de Arte de San Antonio y, posteriormente, regresará a Alemania de donde fue robado.

mva