Un rasgo de alguien que está nervioso es morderse las uñas debido a la preocupación o ansiedad de cualquier situación. De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), este padecimiento se define como onicofagia. La enfermedad de dañarse las uñas recibe varios nombres y tiene que ver también con la forma en la cual se hace. Las personas que se comen los pellejitos que salen en los dedos, padecen una manía llamada onicotilomanía. Ambos padecimientos son compulsiones de las personas para satisfacer algunas necesidades psicológicas. Hay quienes no son totalmente conscientes de ellos y todo esto depende de la personalidad de cada persona y del momento por el cual estén pasando. Las enfermedades inician desde la infancia y adolescencia pero pueden extenderse hasta la juventud y adultez. Los niños pueden iniciar con síntomas de morderse las uñas en caso de sufrir bullying, por ejemplo, o algún trastorno obsesivo-compulsivo. Pixabay Los pequeños con alguna situación de abandono como la pérdida de alguno de sus padres, divorcios o presencia de violencia familiar también pueden comenzar a desarrollar el padecimiento. Los adultos que se muerden las uñas pueden haber estado arrastrado este padecimiento o no haberlo hecho nunca pero por alguna razón se desencadena. Los duelos luego de la muerte de un ser querido, pérdida de empleo o una gran cantidad de estrés pueden ser una de las razones por las cuales iniciaría esta enfermedad. Consecuencias de morderse las uñas Todos estos padecimientos además de ser psicológicos, tienen consecuencias que se pueden convertir en físicas. Las encías pueden ser una de las áreas del cuerpo afectadas por la dinámica de morderse las uñas, por lo que también podría haber infecciones bucales. Los filos que quedan en las uñas son los causantes de lesiones en los labios y también infecciones en el estómago o sistema digestivo. chp